sábado, 14 de agosto de 2010

"ARTETERAPIA Y EDUCACIÓN"

El mundo global que nos ha tocado vivir, exige que nuestras capacidades intelectuales, laborales y sobre todo emotivas respondan de acuerdo a las circunstancias sin embargo la crisis económica, problemas personales, sociales y de salud muchas veces obnubila esta ideal percepción.
Hace poco observaba a mis estudiantes del quinto de secundaria, la mayoría está en el aula ensimismado, cabizbajo, meditabundos, lo que llamo mi atención, cuando empecé a dialogar con ellos comprendí que la razón de esta actitud es la presión familiar, el examen de la primera opción, el ingreso a la universidad, el qué dirán los demás y el cómo se sentirán sus padres si estos no llega a lograrlo, en el colegio la presión escolar, cantidad de tareas, exigencia de los docentes, fantasías e incluso el amor y la decepción. Cada estudiante es un mundo por descubrir y entender.

Por otro lado los medios de comunicación, tanto radiales, televisivos e impresos muestran noticias relacionadas con suicidios, asesinatos, robos, etc. utilizando un discurso plano, nada educativo donde se “normalizan” estos hechos como naturales a la experiencia humana. Ya no hay en estos medios espacios (si es que los hubo alguna vez) para desarrollar la capacidad expresiva de los lectores y exteriorizar las emociones. Los foros en la red están plagados de temas frívolos, vacíos y deshumanizantes

En el ámbito educativo, pienso que somos los maestros los llamados a construir la conciencia de nuestros estudiantes. Es nuestra responsabilidad hacerles notar la diferencia entre lo bueno y lo malo, entre lo ético y lo anti ético. Debemos de tomar conciencia de que por nuestras manos pasan cientos de alumnos que esperan recibir comprensión, afecto y confianza, por la carga emocional que traen consigo. Pero ante esto surgen preguntas muy importantes ¿Cómo nos encontramos emocionalmente los docentes? ¿Estamos realmente preparados para ofrecer ayuda emocional a nuestros estudiantes? Pienso que los maestros, como parte de la sociedad, no somos ajenos a estos problemas.

La salud mental no es cosa de locos ni orates. El estrés no es una invención ficticia. Ambas cosas están en nuestro diario vivir e impiden nuestro normal desarrollo. La realidad en otros países es similar, pero la intervención del gobierno amerita poner como ejemplo, ya que cuida la salud mental de sus niños, jóvenes y adultos, en el Perú, la salud mental es un derecho fundamental de la persona, está relacionado a su dignidad como el resto de los derechos, al desarrollo emocional, afectivo, intelectual, social. A su capacidad de amar y trabajar. En un informe de la Defensoría del Pueblo observa que “La falta de atención de los problemas de salud mental puede generar consecuencias adversas en la capacidad económica y productiva de quienes los presentan. Por estas razones es evidente que la salud mental produce un impacto en los esfuerzos de la lucha contra la pobreza y es un elemento importante para el desarrollo”. Sin embargo, la salud mental continúa siendo un tema postergado en la agenda pública y en las políticas.

La educación juega un rol importante frente a esta realidad y el concepto de Escuela/Colegio como “segundo hogar” debe dejar de ser una metáfora romántica y se convierta paulatinamente en una realidad para miles de estudiantes que proceden de hogares disociados y disfuncionales (que son el grupo de mayor riesgo) esto quiere decir que si el colegio estuviera a tono con los retos sociales de su tiempo, debería convertirse en un escenario de crianza y educación y no solamente de docencia e instrucción como lo era en los siglos pasados.
Es ante esta situación que surge como propuesta el Arteterapia en el aula, para hacer que los estudiantes canalicen la solución de sus problemas mediante la creatividad artística. “El Arte es de vital importancia en la Educación mental, ya que es generador del desarrollo de la expresión creativa natural que todos traen consigo, y estimula tanto las cualidades como los valores sociales, morales y la autoestima. Además tiene la finalidad de introducir la fascinante tarea de la creatividad, la sensibilidad, la apreciación y expresión artística” (Ortiz 2009: 15) Esta propuesta no surge como alternativa al trabajo de los psicólogos, más bien como apoyo.

El aprendizaje y la práctica del arte, más allá de su dimensión ornamental o del goce estético que puede provocarnos, es sin duda una forma de buscar en el interior de nosotros para exteriorizar nuestros conflictos, miedos y abordarlos de un modo indirecto en la expresión plástica. Por ello las diferentes prácticas artísticas que proponemos en el Arteterapia son una opción novedosa de reconciliar problemas emocionales en cualquier tipo de persona. Propone “despertar la autoconciencia, desarrollar habilidades sociales, manejar conductas, resolver problemas, reducir la ansiedad, ayudar a orientar hacia la realidad o incrementar la autoestima”. (Martínez Diez 2006:9)

El Arteterapia como disciplina es relativamente nueva y plantea combinar el arte con la psicoterapia. Lo más importante es la persona y su propio proceso. Y considera el Arte como un medio de comunicación no verbal, de expresión consciente e inconsciente reconoce que los pensamientos, problemas, preocupaciones etc. se expresan con más facilidad en imágenes que en palabras, muchas veces silenciados por los límites verbales. A través del proceso creador se reflexiona sobre el desarrollo de los conflictos personales e intereses de los estudiantes.

Desde esta perspectiva, el uso del lenguaje gráfico-plástico se ha convertido en el Colegio Nacional de Ciencias en una herramienta psicopedagógica de primer orden. Desde el año 2006 que iniciamos esta experiencia con grupos de estudiantes en talleres de Expresión y Liberación. En dichos talleres se ha logrado canalizar, interpretar y resolver algunos problemas emocionales que mostraban los participantes. El resultado fue un mayor incremento del ingenio, desarrollo del pensamiento divergente, mayor nivel de concentración y atención, etc. que se puede ver en el libro “Arte catarsis y sublimación: Potencial Educativo”
En conclusión, la idea de este artículo es resaltar, por una parte, la importancia que ejerce la práctica de arte con sustento en Arteterapia en las aulas escolares para el cuidado y prevención de la salud mental de estudiantes, y por otra, la información y especialización de los docentes en salud mental, para detectar y manejar situaciones de riesgo desde cualquier área del DCB.

No cabe duda, que todavía no somos conscientes del real rol que ejercen las Instituciones Educativas en la formación integral de los estudiantes. Prevenir es también un derecho.


Bibliografía
DEFENSORIA DEL PUEBLO “Salud Mental y Derechos Humanos” Informe 124 04/2010

MARTINES DIEZ, Noemí “Arteterapia” 2006:9 Comunidad de Madrid España. 299 pp.

ORTIZ SALAS, Diana “Arte catarsis y sublimación: Potencial Educativo” 2009: 15 Edit. Killa 97pp

TRAHTEMBER, León “Los errores de los cuales aprendí” 2010:18 Ediciones SM SAC 146Ppp